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El Duelo Imposible. Las Familias y la Presencia de los Ausentes

Autora: Edith Goldbeter

 

Goldbeter, E. (2003) Ed. Herder.

Los ausentes forman parte de nuestras familias, sean ellos silenciosos o secretos, “pesantes” o “ligeros”.

Sensible a esta componente de la vida emocional, he querido incluirla en la comprensión de los procesos intrafamiliares e introducirla en mi práctica de la psicoterapia sistémica. El objetivo de esta obra es sensibilizar al lector, sea o no psicoterapeuta, acerca de la importancia que reviste el lugar de los ausentes en la coreografía familiar.

El primer encuentro entre un terapeuta y sus pacientes puede verse como la puesta en escena de la apertura del sistema familiar a fin de permitir la introducción de un nuevo “tercero”: el interviniente. La hipótesis de trabajo es que este último podría ser “llamado” para ocupar el lugar que ha dejado libre un miembro que cumplía una función particular en la familia: el de “tercero pesante”.

El modelo de lectura que aquí presentamos se articula en la vivencia de la ausencia, la gestión del duelo y la noción de reemplazo. Por tanto, trata acerca de la evolución de los sistemas humanos con el correr del tiempo, con los elementos que favorecen la continuidad y los que generan la discontinuidad de su historia.

Es así que desarrollaremos largamente las nociones que subyacen al modelo del “tercero pesante”, como la relación triangular, la neutralidad, la resonancia, el duelo y, en particular, el tiempo. Si el modelo de tercero pesante, se inspira en el enfoque intergeneracional de Bowen y Framo, como también en el trabajo de Norman Paul en el ámbito del duelo, integra igualmente la cibernética de segundo orden, considerando que el terapeuta se incluye en el sistema que observa.

A fin de permitir situar el modelo del “tercero pesante” en el campo de la terapia familiar sistémica, el capítulo 1 presenta de manera sucinta la evolución del enfoque sistémico desde sus orígenes, como también las escuelas importantes en este dominio científico.

El capítulo 2 describe, a partir de un primer caso, el proceso de surgimiento de la hipótesis acerca de la importancia del ausente en una familia donde el terapeuta se ve llamado a desempeñar un paper reparador con relación a un duelo difícil de realizar.

El capítulo 3 aborda una primera presentación teórica del modelo terapéutico y del concepto de “tercero pesante” sobre el cual se funda. En los capítulos que siguen se tratan las diferentes facetas del modelo a la luz de la literatura del campo sistémico. Este recorrido progresivo permite precisar en cada paso otros aspectos del enfoque aquí propuesto.

El capítulo 4 profundiza la noción de triada relacional y muestra su riqueza en comparación con una concepción diádica de la relación. Es en el marco de los triángulos que se rediseñan las funciones de “terceros ligeros” y de “terceros pesantes”

El modelo de “tercero pesante” tiene una particular riqueza de aplicaciones en el marco de la lectura del funcionamiento de las parejas. En el capítulo 5 se abordará este funcionamiento en cuanto tipo particular de triada relacional.

Si el terapeuta clarifica lo que la familia espera de él y si consigue identificar al “tercero pesante” que la familia desearía ver reemplazado por él, el sistema terapéutico se verá confrontado con la ausencia de este tercero. De ese modo deberían poder atenuarse las tentativas de enmascarar esta confrontación mediante la colocación de fantasmas o de pseudo-reemplazantes, permitiendo así introducir un trabajo de duelo. El capítulo 6 trata acerca de las dificultades de elaboración del duelo y de las técnicas terapéuticas que existen para ello en la terapia sistémica.

En el modelo aquí propuesto no se pretende guardar una neutralidad y una distancia con respecto a la familia sino, muy por el contrario, el terapeuta utiliza como recurso lo que siente, particularmente en lo que concierne a su lugar dentro del sistema terapéutico. El capítulo 7 trata acerca de esta posición a la luz de las que defienden otras escuelas sistémicas.

Como la concepción del trabajo terapéutico que subyace al modelo aquí presentado se articula en la amplificación de resonancias, este último concepto será comparado con otras nociones que tratan también acerca del paso de las emociones entre el terapeuta y sus pacientes: la transferencia y la contratransferencia. Estos dos últimos términos no serán abordados en el terreno psicoanalítico puro (que no es mi eje de referencia ni el objeto de mi práctica) sino a partir del uso que se hace de ellos en las terapias familiares. Estas preguntas se abordan en el capítulo 8.

El capítulo 9 aborda la terapia individual como un terreno posible de aplicación del modelo terapéutico del “tercero pesante”. En efecto, los autores de nuestro campo de investigación no se ponen de acuerdo acerca del número de personas que deben participar en las sesiones de terapia familiar. Por otra parte, la referencia a la noción de “tercero pesante” aclara de manera diferente la pregunta acerca de las presencias requeridas y de las ausencias en el sistema terapéutico.

El modelo terapéutico del “tercero pesante” concede gran valor al tiempo, considerado como pluridimensional. el modelo sitúa el encuentro terapéutico en el seno de una intersección de diferentes tiempos sistémicos e individuales que no son necesariamente sincrónicos. Me parece que una reflexión en torno a este tema puede enriquecer la práctica clínica. Tal reflexión en torno a este tema puede enriquecer la práctica clínica. Tal reflexión se desarrolla en el capítulo 10.

El capítulo 11 sintetiza los diferentes aspectos del modelo terapéutico presentado en este trabajo. Se otorga más importancia a la relación terapéutica que a la especificidad de la sintomatología. Se discute la pertinencia del modelo, como también la noción misma de pertinencia. En efecto, la aparente adecuación de un modelo no demuestra en absoluto la realidad de los elementos sobre los que se apoya. Por el contrario, la misma indica un campo de interpretación dentro del cual pueden encontrarse pacientes e intervinientes. Finalmente en este último capítulo se presentan las conclusiones generales de este trabajo y las perspectivas que resultan del mismo.

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